por Jose Ma | Dic 25, 2022 | autoconocimiento, películas
Solaris es como una metáfora de la creación en la que vivimos en este sistema solar, donde si tomamos al sol como la conciencia creadora y a nuestra conciencia individual, nuestro sol interior, como parte de ese todo sin separación, nuestra vida se va formando a imagen de nuestras impresiones y experiencias, pero como resultado de nuestro estado de sueño, gran parte queda almacenado en nuestro inconsciente, atrayendo situaciones que escapan a nuestro control y que no reconocemos como propias.
Kris, como parte de Solaris y Solaris como parte de Kris, a través del inconsciente dan vida y forma a sueños y errores del pasado atrayendo a personas cercanas que ya no están en su vida.
Gabaldian , uno de los pasajeros desaparecidos de la tripulación aparece en un sueño a Kris y hace una reflexión de lo que está sucediendo: “¿crees que no estás soñando?”. Kris le contesta: “¿y que soy? Le contesta: una marioneta. Kris: ¿y tú no? “O quizás tu seas mi marioneta”. “Como todas las marionetas crees que eres humano.”. “es el sueño de toda marioneta, ser humano”. “formas parte de Solaris. No lo olvides”. Me vino a la cabeza la idea del cuento de Pinocho, de su deseo de ser humano y como en nuestras vidas creemos ser hombres despiertos, pero vivimos como Pinocho atados de manos y pies sin poder hacer. El titiritero (la vida mecánica) hace por nosotros.
Somos marionetas de nuestros pensamientos y sentimientos mecánicos y caemos en los mismos errores de manera recurrente, alimentando nuestro mundo inconsciente, que tarde o temprano reproduce la misma canción. Bailamos al mismo son una y otra vez.
Me recordó una frase del trabajo que dice que nacemos originales y morimos siendo copias; nos adaptamos a nuestro entorno y nos alejamos progresivamente de nuestro yo esencial. Somos extraños en nuestra propia casa.
Al final de la película hay una escena donde Kris está en el suelo y a su lado un niño de pie con el brazo extendido acercando su mano y tocando la de él. Me pasó por la cabeza la imagen de la creación del hombre plasmada por Miguel Angel en la capilla Sixtina. Como si el niño como creador en Solaris pudiera dar una nueva vida a Kris, junto a la chica que amaba. Una virtualidad a medida de los deseos de la máquina.
por Jose Ma | Dic 18, 2022 | autoconocimiento, películas
Esta película es una muestra más de una transformación interna a través de cambios en la conducta y en los hábitos cotidianos. Desnudar un hombre totalmente absorbido por la vida mecánica, vuelto de cara a lo externo, aferrado al éxito, al reconocimiento, lleno de consideración interna, es una prueba complicada. La máquina se revela y se resiste al cambio. Hay una frase que ilustra esta resistencia cuando Nelson se dirige a Sara: “como vuelvas a entrar en mi edificio ( en la máquina, la falsa personalidad), tendré que avisar a la policía ( los yoes negativos que defienden con garras y dientes la cárcel que hemos creado).
Nelson se dirige a Sara: ¿Qué es lo que buscas? ¿ qué quieres de mi?. Parece mas bien que se dirige a sí mismo. Otra parte de él más consciente busca respuestas.
Nelson: “Esto no va conmigo”, cuando Sara le entrega una nueva vestimenta. Es una nueva ropa para vestir su cuerpo, nuevas ideas, nuevas impresiones, un nuevo alimento para vestir su psicología. Dejar atrás las viejas vestiduras psicológicas ( ideas, conductas, hábitos negativos, etc) y experimentar la vida desde otro ángulo, otra perspectiva.
Descubrirse a sí mismo a través de conocer como se manifiesta la parte esencial de otra persona, como vive la vida, como se expresa, como hace experiencia en esta existencia.
Sara es su maestra, le muestra los ejercicios necesarios en la vida cotidiana para escapar del poder de la máquina, de su control y sacar afuera su niño interior deseoso de jugar a vivir.
En la escena cuando Sara venda los ojos a Nelson y éste se mueve por la habitación, parece una analogía de como nos movemos por la vida, llevamos permanentemente una venda psicológica que nos impide ver las cosas tal cual son y tropezamos constantemente en nuestra relación con las otras personas, vamos como sonámbulos, a tientas, no somos dueños de nuestros pasos.
Después del fracaso en la reunión de Nelson y su compañero de trabajo con un empresario del mundo de la publicidad, Nelson dice: “ese tipo no va conmigo”. Su amigo replica: “estáis clonados del mismo ADN”. Nelson responde: “ no me parezco a ese hombre”, “si es así mátame”. Nelson se observa y se recuerda a sí mismo, se ve desde otro nivel, ha visto en el empresario grosero, altivo, a su antiguo yo, a su antigua personalidad. Al final de la película Nelson camina por la calle, se detiene y ve con más detalle su entorno, la gente, la ciudad, parece que la venda que tapaba sus ojos cayó y puede ver la chispa que hay en todas las cosas, en la vida, en las personas, es una mirada que viene de dentro, una mirada limpia de animosidades. Ahora todos los meses son noviembre, su sabor dulce, el sabor interior está en cada instante, días, meses, años, en toda la vida.
por Jose Ma | Dic 11, 2022 | autoconocimiento, películas
Una de las ideas principales que plantea esta película es que con esfuerzo se obtienen resultados y que el conocimiento por sí solo no equivale a sabiduría, hay que hacer este conocimiento en uno, es decir llevarlo a la práctica, hacerlo experiencia, que no quede sólo en teoría.
La gasolinera es el contexto donde se desarrollan los conocimientos de escuela, donde se aprende el conocimiento que luego llevamos a la vida; aprovechar lo que se aprende en el entrenamiento como guerrero, para llevarlo a la vida, entrenarse en la vida. El instructor (el operario de la gasolinera), llena el depósito de nuestra mente con un nuevo combustible (nuevas ideas, enseñanzas, conocimiento), para que nuestro vehículo (nosotros) tengamos un camino (vida) más consciente, experimentando el viaje en la dirección del despertar, pero para ello hemos de tener nuestro depósito interior vacío del viejo combustible (identificaciones, emociones negativas, yoes recurrentes, charla interior, etc). La gasolinera es la Escuela para este propósito.
Aquí el instructor propone sacar todo lo que no se necesita de la cabeza y de nuestra vida, como indica el trabajo abandonar todo aquello que no es bueno para nuestro crecimiento interior. Bajo esa construcción artificial que ha dado forma a nuestra vida, se encuentra nuestra verdadera naturaleza, lo que realmente somos.
La persona consciente puede expresarse en cualquier ámbito, la comprensión la puede llevar a cualquier situación. Cuando la comprensión está en uno, está en todo lo que hace, piensa y siente, y se refleja en todos los eventos de su vida.
La persona consciente (Nick Nolte), le propone al alumno, dejar ciertos hábitos tóxicos, la basura en su vida y adquirir nuevos hábitos con ejercicios nuevos, para ordenar su vida.
El escenario donde se desarrollan los eventos, puede ser diferente en cada persona, pero el estado, la actitud como lo encaramos es lo importante.
Me sedujeron varias frases como: “todo en la vida tiene un propósito y depende de ti descubrirlo”,
“ser guerrero no es ser perfecto”.
La conciencia se expresa a través de todo lo que nos rodea y vamos juntando pedazos de conciencia de nuestras experiencias en las relaciones con otras personas y nuestro entorno.
No hay límites para la conciencia, el límite esta en nuestra mecanicidad, en nuestra falsa personalidad.
El viaje, (el durante), con todo lo que hay, es lo que da el valor a la meta: la meta es el viaje.
Un compañero del protagonista pensando en las olimpiadas, decía muy preocupado, ‘nos jugamos el oro” y pensaba que el oro ya lo tenemos en este mismo instante, en el ahora. Somos oro, pero está tapado, oculto bajo una capa de artificios y falsa personalidad. Lo real en nosotros no podemos verlo tal y como estamos dormidos. Buscamos el oro fuera y quedamos atrapados en el mundo sensual de los sentidos.
por Jose Ma | Dic 4, 2022 | autoconocimiento, películas
Esta es una película con muchas frases para destacar, pero que resumo para no alargarme.
Atrapado en el tiempo, es atrapado en nuestra propia psicología de máquina dominados por el orgullo, el ego, la consideración interior, la vanidad, que arrastran a Phill a repetir los mismos errores una y otra vez, la misma bofetada cada día. El no es consciente que la bofetada se la da a sí mismo a través de Rita, porque no es capaz de interpretar los mensajes de su ser, no los escucha. Sólo oye a su parte más externa, los yoes que habitan en las partes más mecánicas de los centros.
La marmota Phill es como una representación simbólica del estado psicológico de estar dormido, el sueño del estado de vigilia en nuestra vida ordinaria, el invierno metafóricamente hablando.¿ cuánto más se alargará el sueño?, ( el invierno). ¿Cuándo llegará la primavera?, el despertar.
Los dos Phill, tanto la marmota como el protagonista están dormidos, atrapados en su jaula, una literal en la marmota y otra psicológica en Phill Connors.
Como no tiene una Escuela, ni los conocimientos, Phill hace un camino más largo para descubrir porqué está atrapado en ese día indefinidamente. No es consciente del proceso interior de transformación. Necesita muchas vidas y tropiezos para pensar de una nueva manera, con recurrencia y sufrimiento inútil. No puede conocer la profundidad que tiene el charco hasta que no mete la pierna dentro, cuando ya es demasiado tarde.
Phill reflexiona: “ una vez estuve en las islas vírgenes, conocí a una chica, comimos langosta, bebimos piña colada, al ponerse el sol hicimos el amor como nutrias marinas. Aquel sí que fue un día bastante bueno. ¿por qué no puedo tener aquel día? Otra vez y otra y otra.”
Pensé que atrapado en un día que rechazamos puede aportar más material para una transformación interior que un día perfecto para nuestros sentidos. El ser quiere otro tipo de alimento e impresiones para hacer experiencia.
Phill se refleja en Rita (lo esencial en nosotros), sensible, jovial, empática, espontánea, etc., esa parte suya que tiene enterrada y que ve a través de ella. Rita es como un maestro o guía, como una luz en ese túnel sin final que está atravesando Phill.
Se plantean preguntan existenciales como: “¿Qué haríais vosotros si estuvierais atrapados en un lugar y cada día fuera el mismo y nada de lo que hicierais importara?” y uno de los compañeros de Phill contesta: “ese es el resumen de mi vida”; tiene un instante de recuerdo sí. Es un ejemplo del estado en que estamos.
Cuando Phill quiere conquistar a Rita, todas sus manifestaciones nacen de lo falso y como tal, tarde o temprano está destinado a fracasar. Es alimento para el ego y esta construcción artificial no se sostiene porque la base se creó desde la falsa personalidad.
Podemos crear un día (una vida) “perfecto” desde la falsa personalidad, la primera versión de Phill, la que se adapta a la vida y se disfraza para cada evento, o crear un día y una vida desde la esencia, lo real, la segunda versión de Phill, que hace, siente y piensa objetivamente, con consideración externa y un amor real incondicional. Esta versión es la que tiene el poder transformador en nosotros.
Crear hábitos positivos, nuevas tareas, como se propone en el trabajo de Escuela, un nuevo alimento para que nuestro ser pueda crecer y atraer una nueva vida. Un nuevo hombre.
Al final cuando despierta y mira el reloj a las 6 y un minuto, ve que Rita (su esencia) está junto a él y le pregunta: “(por qué estás aquí?” y Rita le contesta: “ me dijiste quédate y me quedé”. Ahora su parte esencial está presente, esta con él, dirige su vida, es activa. Su personalidad ha cambiado para ayudar a la esencia en su crecimiento.
Y al nacer un nuevo día Phill pregunta: “¿sabes que día es hoy?, ha ocurrido. Es el final de un día muy largo”. Es el final de un sueño muy largo.
Una última reflexión de Rita: “cómo podemos empezar un día con unas expectativas y acabar de un modo tan diferente”. Aunque en esta vida estemos presos del sueño, está en nosotros la posibilidad de darle la vuelta. Un cambio en la actitud puede cambiar nuestra vida.