Una de las primeras ideas que me vino al mirar esta película es la importancia que tenemos cada uno de nosotros para cumplir con la función que elegimos en el origen, la tarea específica para la que vinimos a esta virtualidad, pero que muchos olvidamos y hacemos las tareas de otros y éstos otros hacen las tareas que tendríamos que estar haciendo nosotros. Algo parecido como cuando en nuestra psicología un yo suplanta a otro, o un centro hace la función que no le corresponde. Entonces se origina un desequilibrio y la máquina humana no funciona de manera correcta y esto se refleja en nuestra vida cotidiana, con acciones erróneas, confusión y sufrimiento. 

Todo en la película es como una gran maquinaria (la vida), donde cada pieza (personas), tienen una función específica elegida al inicio para que el objetivo, el propósito pueda realizarse. 

Surgen varias ideas existenciales en frases como: “tú eres el que decide”, al origen, “si estás ahora aquí, no es para escoger”, “ tú ya elegiste. Has venido a intentar comprender por qué lo hiciste. “Cada uno está aquí para hacer lo que tiene que hacer “.

“Yo debo saberlo, es mi objetivo, por eso estoy aquí, por eso estamos aquí”.

En este camino en busca de la verdad, como aquí hace Neo para encontrar la fuente, el origen de Matrix, todas las piezas, los componentes tienen que estar en el lugar y el momento adecuado y conocer la función concreta para la que fueron destinados. Unos proteger, otros crear llaves, otros anunciar el futuro, etc. Como cuando vamos a la ferretería y pedimos al dependiente los accesorios, arandelas, tornillos, juntas de goma, cola, etc. y las herramientas, tenazas, martillos, taladro, lijadora, etc., necesarias para el montaje, reforma o reparación de un objeto. Cada utensilio diseñado para una función determinada y concreta.

Cuando las máquinas, (centinelas) intentan invadir Sion, me acordé cuando influencias externas de la vida mecánica quieren penetrar en nuestra psicología, destruir nuestra libertad y nuestra individualidad para ser como las hormigas o las abejas, un grupo de presos controlados por el sistema o Matrix , una gigantesca cárcel donde creemos ser libres y donde nos movemos y vivimos como en un sueño que parece muy real.

Cuando Neo visita el oráculo, ya sabe las respuestas, pero no recuerda. El oráculo está dentro de cada uno de nosotros, es nuestro yo real plenamente consciente, que conoce presente, pasado y futuro de manera simultánea.

Neo, se responde a sí mismo a través de la mujer que representa el oráculo, porque no hay separación, como una única conciencia.